Entre las ventajas de contar con riego presurizado destaca la elevada eficiencia de uso del agua, uniformidad de aplicación, aprovechamiento de tierras marginales y facilitación de tareas en general.
Sin embargo, estos sistemas requieren de un mantenimiento adecuado para su correcto funcionamiento tanto desde el punto de vista agronómico como hidráulico. De esta manera se asegura, en términos económicos, un óptimo aprovechamiento energético y su amortización en el tiempo de la inversión. En consecuencia, en toda instalación de riego presurizado es fundamental, entre otras cosas, determinar la uniformidad de riego con que opera el sistema.
Son variados los factores que influyen en la uniformidad con que descarga el sistema, algunos de estos son:
* Los materiales y procesos de fabricación: cuando éstos no son exactamente iguales entre sí, proporcionan un caudal de descarga diferente para la misma presión de funcionamiento del sistema.
*El diseño del sistema: Un mal diseño afecta directamente en el funcionamiento del sistema ya que produce diferentes pérdidas de carga y variación en las presiones de trabajo. Así mismo, una elección errónea del filtro incide directamente en la obstrucción de emisores.
*Obstrucciones: pueden ser causadas por materiales de diferente naturaleza; sólidos en suspensión, precipitados, algas y microorganismos.
El coeficiente de uniformidad (CU) se define según la expresión siguiente:
Donde,
qm es el caudal medio de una instalación de riego y q25 es el caudal medio de los emisores que constituyen el 25 % con el valor de caudal más bajo.
Procedimiento de Aforo de Emisores
La determinación del caudal de goteros, microaspersores y microjets es rápida y sencilla. Se mide el volumen de descarga del emisor en un tiempo determinado (36 seg).
Para el aforo de goteros, se debe medir en una probeta o vaso precipitado graduado de 50 o 100 ml y para microaspersores y microjets se debe usar una probeta o jarro graduado de 500 a 1000 ml.
Para calcular la descarga del emisor se divide el valor obtenido por 10, ejemplos:
En 36 s se llenan 20 ml, luego el caudal es de 2 litros/hora – gotero.
En 36 s se llena 410 ml, luego el caudal es de 41 litros/hora – aspersor.
Para obtener un valor de Coeficiente de Uniformidad se recomienda medir 12 emisores por sector, repartidos en 4 líneas, tomando siempre la primera, la última, al 1/3 y al 2/3 del sector como lo muestra el siguiente esquema.
Además de esta medición, es importante determinar la presión en el extremo de la línea de riego, esto se realiza con un manómetro de mano, el resultado debe ser mayor o igual a 1 bar. Igualmente, en las válvulas de cada sector la presión se verifica con un manómetro con aguja, es conveniente anotar el valor en la válvula con marcador permanente, así cada vez que se verifique se puede comparar con el valor que debe tener.
Repetir procedimiento en todos los sectores de riego del campo, registrar en la planilla y hacer los cálculos correspondientes.
El resultado nos permite evaluar qué tan buena es la uniformidad de descarga del sector de riego según la siguiente tabla:
| Funcionamiento | Coeficiente de uniformidad (%) |
| Excelente | 90-100 |
| Buena | 80-90 |
| Aceptable | 70-80 |
| Inaceptable | <70 |
Es muy importante hacer esta medición una par de veces en la temporada porque la descarga puede fallar de un momento a otro y ésta es una forma rápida y segura de detectar el problema. La observación permanente del sistema de riego y la implementación de un programa de mantención, permitirá prolongar la vida útil del sistema de riego, haciendo más eficiente la entrega de agua y de fertilizantes al cultivo, traduciéndose ello en mejor productividad.